Para hacer un primer listado de keywords resulta un tanto indiferente la herramienta que se utilice. Si bien es verdad que con los softwares más potentes de pago se puede obtener un completo keyword research en un par de horas, mientras que con acciones manuales o tools más modestas la tarea puede alargarse por varias jornadas.

Sin embargo, a lo que se le pretende dar relevancia es al hecho de que este primer listado ha de incluir todos los términos relevantes de las distintas temáticas, sean estos de la fase del funnel que sean, short y long tail, así como palabras complementarias que los usuarios utilizan o que la competencia tiene en su estrategia.

Aunque casi siempre que se habla del SEO pareciera que lo importante es tener un amplio listado de keywords -que en muchas ocasiones distan mucho de estar alineadas con el objetivo de la empresa-, lo cierto es que la parte más difícil, y también aquella que más valor aporta en una estrategia de posicionamiento es la selección de las palabras clave. Por eso, a continuación exponemos algunos de los criterios que se pueden utilizar y que resultan válidos para encontrar las keywords que tu negocio realmente necesita trabajar.

Hemos visto en muchas ocasiones a agencias de posicionamiento elegir palabras que no tienen relevancia alguna para el negocio con el objetivo de “sumar tráfico”. En realidad, si vendes herramientas para profesionales de la albañilería, posicionarte dentro keywords que seguramente tienen una gran cantidad de búsquedas, pero que no utiliza tu target no va a ayudarte en absoluto. Por ejemplo, ¿qué es una ingletadora? o trucos fáciles para arreglar una pared, no parecen encajar en absoluto con la audiencia con la que pretendes conectar. 

Es probablemente la métrica más relevante. De hecho, si todas las keywords con las que te has quedado se corresponden con tu audiencia -ya sea en la primera fase del funnel o en aquella más cercana a la compra- sí resulta fundamental trabajar aquellas que garantizan que el usuario llegue en todos esos momentos al negocio en Internet. Y hacerlo dando prioridad a las que más búsquedas generan es una de las claves para un buen posicionamiento.

En muchas ocasiones el CPC como métrica en campañas SEO resulta confuso. Son muchos los empresarios sin conocimientos técnicos que llegan a dudar  de que los buscadores no les cobren por el tráfico. En realidad, la relación entre el concepto de CPC y su relevancia SEO se crea por ser el coste por click un sinónimo de capacidad de conversión. Por pura lógica, parece obvio pensar que si hay anunciantes que pagan por aparecer cuando se busca ese término es porque es rentable. Por tanto, aunque sea un dato de SEM, siempre es relevante para el SEO.

Respecto a la dificultad, es otra de esas métricas que sirven para filtrar o para organizar por prioridad las palabras claves en las que se va a trabajar o a ejecutar la estrategia de posicionamiento orgánico. Ante la duda entre dos términos muy parecidos, con métricas similares, se puede optar por el fácil para aparecer en el corto plazo; o por el difícil porque se presupone llevará mucho más tiempo posicionarse en el mismo.

Al no tratarse de una métrica cuantitativa, es difícil de comprender si no se es experto en la materia. Sin embargo, la elección de las palabras clave supone la selección del contenido en el que las mismas van a ser insertadas. Y eso significa que una buena palabra clave, con unas métricas perfectas, puede acabar en un porcentaje alto de rebote si no se alinea con la intención del usuario al hacer esa búsqueda. Pongamos un ejemplo.

Volviendo al caso previo de la empresa que vende herramientas a usuarios profesionales de la albañilería, supongamos que hay una nueva máquina que permite reducir los tiempos al hacer masa, y que la misma se llama Matrix XS. Pues si se trabaja correctamente la keyword comprar Matrix XS y se consigue posicionar esa página en las primeras posiciones, pero el usuario al acceder a ella se encuentra con información que solo le muestra las características, sin opción de compra alguna, es probable que la abandone llevándose una mala imagen de la firma. Y eso resultará en un alto porcentaje de rebote que los buscadores suelen tener en cuenta para ir bajando posiciones en ese término. Por tanto, no es buena idea. 

Recuerda que las estrategias SEO elaboradas por un profesional en la materia son las que realmente harán que a largo plazo tu empresa consiga estar en las principales búsquedas de los usuarios que realmente van a comprar en tu negocio. Y ese es el objetivo de tu empresa.