El capital humano es un factor fundamental para el rendimiento de las compañías. Todas las organizaciones, independientemente de su tamaño y sector de actividad, necesitan contar con trabajadores que se sientan satisfechos y motivados. Desde hace años, las formas de liderazgo están cambiando, y también la consideración que se tiene de los empleados.

El bienestar laboral se puede conseguir poniendo en marcha distintas medidas centradas en las necesidades de los trabajadores para mejorar su nivel de satisfacción.

En primer lugar, es esencial crear un espacio de trabajo que sea confortable para los empleados, de forma que tengan a su disposición los recursos necesarios para desarrollar su actividad laboral en las mejores condiciones.

También es importante crear una rutina variada porque, según han demostrado varios estudios, los trabajos lineales desgastan mucho mentalmente. Los trabajadores deben enfrentarse a diferentes retos para aumentar su motivación.

Otro aspecto muy valorado por los trabajadores es ver cómo se reconoce su eficiencia. La recompensa no tiene que ser necesariamente económica, sino que muchas veces prefieren palabras agradeciendo su dedicación. Una medida que aporta muchos beneficios para la empresa y los empleados es el desarrollo de programas formativos.

La formación y concienciación en ciberseguridad son las mejores herramientas para protegerse de los ataques informáticos. Durante la pandemia del Covid-19, el teletrabajo ha irrumpido como una opción cada vez más común entre empresas de todo el mundo, lo que contribuye a aumentar los puntos susceptibles por los que puede ingresar el software malicioso.

Desde que comenzó la pandemia del coronavirus, se ha demostrado que el modelo de trabajo híbrido aumenta la productividad de los trabajadores.

Los empleados flexibles pueden utilizar y organizar mejor su tiempo y, además, se pueden concentrar plenamente en las tareas laborales sin las interrupciones y los ruidos del entorno de oficina tradicional.

Además, tienen la posibilidad de trabajar cuando se sientan más productivos.

En un estudio de SurveyMonkey llevado a cabo en 2020, los empleados que trabajaron a distancia afirmaron sentirse más satisfechos, y los principales motivos que alegaron fueron los siguientes: asumir el control de sus horarios, poder trabajar con su mascota al lado, poder vestirse de manera informal y pasar más tiempo con sus seres queridos. Ahora bien, para otros, trabajar desde casa es una experiencia asociada a las distracciones y al aislamiento.

Un modelo de trabajo híbrido permite mitigar muchos de los inconvenientes asociados al teletrabajo en formato exclusivo, generando un espacio profesional fuera del hogar en el que los trabajadores también pueden relacionarse con sus compañeros.

En una oficina híbrida, no hay que asignar puestos fijos a todos los empleados, lo que se traduce en un considerable ahorro de costes operativos para las empresas.

Uno de los aspectos que ha propulsado la pandemia del coronavirus es la transformación digital. Más allá de la crisis sanitaria, las empresas deben estar preparadas y adquirir todas las habilidades y competencias para adaptarse a una realidad cambiante.

En lo que respecta al entorno laboral, está teniendo una transformación que va mucho más allá del teletrabajo. Desde Randstad Technologies afirman que las compañías han tomado conciencia de la necesidad de iniciar el proceso de transformación digital.

Tendencias como el Blockchain o la Inteligencia Artificial han tomado especial relevancia, y los canales de venta, ya sean a través de la web o móviles, han sido vitales para mantener el comercio durante la pandemia.

Por su parte, el sistema de analítica avanzada es un conjunto de tecnologías utilizadas para la creación y administración de la información disponible, de forma que se puedan obtener datos relevantes para facilitar la toma de decisiones.

Imágenes: Unsplash y Freepik