Automatización de procesos con flujos no-code y low-code

La automatización de procesos se ha convertido en una necesidad para las empresas. El entorno está cada vez más digitalizado, lo que posibilita simplificar todo tipo de tareas. A la hora de conseguir este objetivo, los flujos no-code y low-code despuntan como una de las mejores soluciones del momento.

¿Qué son los flujos no-code y low-code?

Los flujos no-code y low-code son enfoques de desarrollo de software para la creación de aplicaciones y la automatización de procesos con mínimo o nulo código. Dadas sus características básicas, permiten que los usuarios sin experiencia en programación puedan desarrollar soluciones tecnológicas mediante interfaces visuales intuitivas o configuraciones predefinidas.

Para que los conozcas en detalle, los flujos no-code ofrecen herramientas visuales para construir aplicaciones y automatizaciones sin escribir una sola línea de código. Este tipo de plataforma utiliza elementos de arrastrar y soltar, formularios preconfigurados u opciones personalizables de forma sencilla. Las organizaciones que más partido sacan son las pequeñas empresas o departamentos dentro de grandes corporaciones que requieren soluciones rápidas y específicas sin depender de desarrolladores informáticos.

El otro modelo, los flujos low-code, cuentan con una interfaz visual para el desarrollo, pero posibilitan incorporar código personalizado para extender las funcionalidades de una aplicación. Esto brinda mayor flexibilidad y es más adecuado para programas empresariales complejos que precisan características específicas que no pueden cubrirse con parámetros predefinidos.

Igualmente, basta que el programador tenga conocimientos básicos para efectuar los cambios.

La automatización de procesos se simplifica con los flujos no-code y low-code

Usos comunes de la automatización de procesos con no-code y low-code

Ambos flujos han revolucionado la forma en la que las empresas manejan la automatización de procesos industriales. Piensa que el mero hecho de no necesitar conocimientos avanzados de programación es un gran progreso. A continuación, descubrirás algunos de los empleos más comunes donde estas tecnologías han demostrado su efectividad.

Gestión de flujos de trabajo

Las herramientas permiten automatizar actividades repetitivas, como la aprobación de documentos, la asignación de tareas y el seguimiento de proyectos. Gracias a sus posibilidades, se diseñan procesos que aseguran la coherencia y eficiencia al reducir la intervención humana.

Integración de sistemas

Las plataformas no-code y low-code son ideales para integrar sistemas, porque permiten conectar diferentes aplicaciones y servicios. Los flujos automatizados pueden sincronizar datos entre un CRM, un ERP y otros sistemas sin necesidad de introducir información a mano.

Automatización de la atención al cliente

En este caso, se automatizan las respuestas a preguntas frecuentes a través de chatbots, así como las solicitudes y quejas más habituales. Esto mejora la experiencia del cliente, pues resuelve dudas de manera rápida y precisa. Asimismo, libera tiempo para que el personal se concentre en los casos de mayor complejidad.

Marketing y ventas

La ventaja de los flujos en este sector reside en que facilitan la automatización de campañas, desde el envío de correos electrónicos segmentados hasta el seguimiento de leads. También pueden integrarse con sistemas CRM para agilizar la gestión de clientes potenciales y aumentar las ventas.

Además, si combinas el poder de la tecnología con un buen embudo de ventas, mejorarás aún más los resultados. Pero ¿cómo confeccionar un embudo eficaz? Con esta guía, en Cámara Madrid te damos las claves esenciales para tus futuros éxitos.

Recursos humanos

En recursos humanos, estas tecnologías ayudan a automatizar procesos como la incorporación de empleados, la gestión de beneficios o el seguimiento del rendimiento. Las herramientas sirven para crear formularios digitales o simplificar el manejo de solicitudes de vacaciones, por poner dos ejemplos.

Pasos para implementar flujos de automatización no-code y low-code

Implementar flujos de automatización puede transformar significativamente la eficiencia de una empresa. Para que sepas por dónde empezar, nada mejor que conocer los pasos que debes seguir. Así, lograrás una correcta implementación.

Identificación de procesos automatizables

El primer paso consiste en identificar qué procesos son apropiados para la automatización. Los más habituales suelen ser tareas repetitivas, manuales y propensas a errores que consumen tiempo y recursos. Evalúa el impacto y los beneficios potenciales que es posible conseguir antes de seguir adelante.

En este punto, también es interesante que comiences a plantear una estrategia de escalabilidad. ¿Por qué razón? Si tienes una pyme, es probable que la automatización te ayude a crecer. A la hora de aprovechar la oportunidad, en esta guía descubrirás cómo implementar el plan que requieres para avanzar.

Selección de la plataforma adecuada

Una vez identificados los procesos, hay que seleccionar la plataforma más adecuada para cubrir las necesidades específicas de la organización. Es esencial que consideres factores como la facilidad de uso, la capacidad de integración con otros sistemas, la escalabilidad y el soporte técnico proporcionado por el proveedor.

Diseño y configuración de los flujos

Con la plataforma seleccionada, es el momento de diseñar y configurar los flujos de trabajo automatizados. Esto implica utilizar las herramientas visuales de arrastrar y soltar para mapear los pasos de cada proceso y definir las reglas y condiciones que activarán las acciones. Es crucial que te asegures de mantener una buena lógica y eficiencia.

Pruebas y optimización de los flujos automatizados

Antes de poner en marcha los flujos automatizados, pruébalos de manera exhaustiva. Efectúa simulaciones para identificar posibles errores o ineficiencias. Con base en los resultados, no tendrás dificultades para realizar ajustes previos al lanzamiento final.

Supervisión y mantenimiento continuo

La implementación de flujos de automatización no termina con su puesta en marcha. Es vital que supervises con regularidad su rendimiento y que lleves a cabo un mantenimiento continuo para garantizar su eficacia. Esto incluye actualizaciones, corrección de errores o modificaciones en funcionalidades.

Como has visto, la automatización de procesos es una gran ayuda que es preciso implementar bien. Piensa que no es apropiado dejar todas las acciones en manos de un programa, lo que exige revisar cuáles son las más indicadas. Si estás buscando más contenidos sobre las últimas tecnologías para empresas, en Cámara Madrid te ofrecemos una amplia variedad. ¡Descubre cómo potenciar tu negocio y llevarlo al siguiente nivel