El proceso de transformación digital en la industria: pasos esenciales

La transformación digital en la industria se refiere a la implementación de tecnologías informáticas para mejorar la productividad y competitividad de sectores tan diversos como el de fabricación, logística, ventas y servicios posventa. Hablamos, por ejemplo, de la automatización de la producción, el análisis de datos, la inteligencia artificial, la robótica y la realidad aumentada, entre otros. Encontraréis más información en esta guía sobre hiperautomatización que hemos elaborado.

Entre sus beneficios, destacan la reducción de costes, el incremento de la calidad y la optimización del tiempo de entrega. No obstante, también os permite la personalización de productos y servicios y, en consecuencia, la satisfacción del cliente, de la que Wiwink, proveedores homologados de TIC Negocios y expertos en transformación digital, son buenos conocedores.

Transformación digital en la industria

La transformación digital en la industria implica varias fases fundamentales.

Análisis de la situación inicial

Consiste en evaluar el estado actual de la organización en términos de procesos, sistemas y tecnologías. Debéis considerar algunos aspectos importantes:

Identificación de las áreas críticas de la empresa: Incluyen aquellas que más necesitan modernizarse y tienen un mayor impacto en la cadena de valor.
Valoración de la madurez técnica de la sociedad: Se examina su grado de automatización. Para ello, se estudian aspectos como el uso de tecnologías preexistentes, la cultura organizacional y la capacitación del personal.
Evaluación de la eficiencia y eficacia de los procesos: Se detectan los cuellos de botella y las oportunidades de mejora.
Examen de las tecnologías existentes, su impacto y eficacia.
Reconocimiento de los datos disponibles, su calidad y relevancia.
Análisis de la seguridad y privacidad de los datos para valorar el cumplimiento normativo y la protección de la información confidencial.

Establecimiento de objetivos

Algunos de los objetivos comunes incluyen:

Aumento de la eficiencia operativa: La digitalización favorece la relación del producto con los recursos invertidos en las distintas fases, reduce los costes y optimiza su calidad.
Mejora de la experiencia del cliente: Perfecciona la relación con los clientes, permite ofrecerles soluciones personalizadas y una experiencia de compra más satisfactoria.
Incremento de la innovación: Promueve la puesta en marcha de nuevos productos y servicios, además de desarrollar la capacidad de la empresa para adaptarse a los cambios del mercado.
Facilita la toma de decisiones: Os capacita para recopilar, analizar y utilizar la información con el fin de tomar decisiones informadas y estratégicas.
Incremento de la seguridad: La digitalización aumenta la protección de los datos, los sistemas y los procesos implicados.

Identificación de las tecnologías relevantes

Depende mucho del sector y de la organización en cuestión. Sin embargo, las siguientes tecnologías han sido definidas como las más relevantes:

Internet de las cosas en industria (IIoT): Los dispositivos IoT mejoran la productividad en las plantas de fabricación. Además, facilitan la monitorización en tiempo real del desarrollo de cada fase y la toma de decisiones informadas.
Big data y análisis de datos: La recopilación y estudio de grandes cantidades de información facilitan a las organizaciones la detección de patrones y tendencias, además de optimizar sus procedimientos.
Inteligencia artificial y aprendizaje automático: Incrementan la eficiencia y la automatización, a la vez que permiten una mayor flexibilidad y adaptabilidad.
Realidad aumentada y virtual: Aumentan la productividad y simplifican la formación de los trabajadores al ser más precisa.
Automatización y robótica: Reducen los costes, potencian la calidad de los productos y optimizan la realización de tareas.

Evaluación de soluciones

Implica la identificación e investigación de diferentes opciones tecnológicas para alcanzar las metas propuestas. En esta etapa, son importantes factores como la compatibilidad con los sistemas existentes, el coste, el tiempo de implementación y los beneficios. Los pasos a seguir son:

Identificación de opciones tecnológicas: Pueden referirse a un software de gestión, sistemas de automatización o herramientas de análisis de datos, entre otros.
Estudio de las opciones determinadas basadas en información contrastada.
Selección de la solución adecuada: Debe estar basada en una evaluación completa de todas las posibilidades, en la consideración de los objetivos establecidos y los recursos disponibles.

Implementación

Esta es, sin duda, una de las fases más críticas en la digitalización. En ella, se ponen en marcha las soluciones tecnológicas y se integran con las rutinas productivas de la organización. Algunos pasos clave:

Planificación: Se define un plan de acción que incluye los plazos, recursos y responsabilidades para la implementación de las soluciones.
Preparación: Se asegura que el personal esté capacitado y tenga los recursos necesarios para llevarla a cabo.
Desarrollo: Se procede a la implementación técnica de los nuevos avances.
Integración: Se integran las soluciones con el desarrollo procedimental de la organización y se realizan pruebas de compatibilidad y funcionamiento.
Capacitación: Se forma al personal en el uso de las tecnologías implementadas.

Monitoreo o seguimiento

Garantiza el éxito de la implementación para aseguraros de que se están cumpliendo los plazos y los hitos establecidos.

Los resultados y métricas para evaluar el impacto de la transformación digital. Incluyen desde el incremento la eficiencia operativa hasta la reducción de costes. Tampoco olvidan el aumento de la productividad o la mayor satisfacción del cliente.
La retroalimentación del usuario para identificar áreas de mejora y oportunidades de optimización.
Las tendencias y avances tecnológicos. De esta forma, os cercioráis de que vuestro negocio está utilizando las soluciones más actualizadas y efectivas para mantener su competitividad.

Mejora continua

Este aspecto resulta fundamental para medir el desempeño e identificar oportunidades de perfeccionamiento y optimización. Para ello, se emplean herramientas de análisis de datos y de seguimiento, como los indicadores clave de rendimiento (KPI). Estos KPI son específicos de cada proceso o área y deben estar alineados con los objetivos de la digitalización.

En resumen, la transformación digital en la industria implica una serie de fases que se inicia con el análisis de la situación de la que se parte y los objetivos. Una vez implementados los cambios, es necesario medirlos y monitorizarlos, así como emplear las herramientas necesarias que contribuyan a destacar vuestra presencia en la red, como Google Mybusiness.

Para lograr dicha metamorfosis, en el portal de la tecnología de Cámara de Madrid os proporcionaremos el asesoramiento preciso para ayudaros en la modernización de vuestros negocios. No en vano, nuestros partners tecnológicos destacan por su excelencia en su sector. Un claro ejemplo es Wiwink, una lanzadera donde podéis contratar todo lo que necesitáis para transformar vuestro negocio. Para más información, contactad con nosotros.