El trabajo híbrido se define como una combinación de trabajo presencial y remoto que se puede presentar en diferentes modalidades, en base a las necesidades de la empresa y las preferencias de los empleados. Algunas organizaciones apuestan por el modelo 50/50, mientras que otras prefieren dar mayor peso a una de las modalidades con el modelo 70/30.

No hay una regla universal sobre cuál de las alternativas es mejor. Algunas empresas priorizan el tiempo en la oficina de sus empleados, mientras que otras hacen justo lo contrario y refuerzan el trabajo en remoto. En cualquier caso, gracias a las nuevas tecnologías, cada vez más organizaciones eligen esta estrategia de gestión.

Para los empleados el trabajo híbrido es muy beneficioso porque les aporta mayor flexibilidad a la hora de compaginar su vida personal y profesional. Los empleados con más flexibilidad y autonomía son más felices y, por lo tanto, más productivos. Para las organizaciones, esta modalidad supone una importante reducción de costes. Además, tienen la posibilidad de contratar al mejor talento, independientemente del lugar donde se encuentre.

Para sacar el máximo provecho al modelo de trabajo híbrido la gestión del tiempo es fundamental. Antes de comenzar la jornada laboral es conveniente dedicar unos minutos a organizar las tareas, identificar las prioridades y establecer rutinas.

Los especialistas explican que en muchos casos los empleados tienen un sentimiento de culpa por no encontrarse en la oficina, lo que les lleva a estar disponibles 24/7. Pero, al igual que no se hace en el trabajo presencial, tampoco debe hacerse en el remoto. Estar “hiperconectado” cuando se teletrabaja es uno de los errores más comunes que hay que evitar.

Cada entorno de trabajo tiene sus propias ventajas y desventajas, así que esperar los mismos resultados en la oficina que en casa es un error. Hay que ser flexibles con las expectativas y enfocarse en los objetivos.

Los trabajadores tienen que ser conscientes de las diferentes tareas que deben realizar durante la jornada laboral. Para ello, es importante que sepan diferenciar entre lo urgente y lo prioritario.

El teletrabajo está más de moda que nunca, y no se trata de una simple tendencia pasajera, sino que ha llegado para quedarse. Las nuevas tecnologías permiten que los profesionales puedan desempeñar sus actividades desde casa, sin la necesidad de su presencia en la sede de su organización. Según un estudio de la Universidad de Stanford, los empleados que trabajan de forma remota son un 13% más productos que los que acuden a la oficina.

Ahora bien, los empleados que ven en el teletrabajo una opción muy atractiva deben ser conscientes de que hay algunos aspectos clave para afrontar esta actividad con éxito, siendo productivos y mejorando su satisfacción.

Aunque el trabajo desde casa permite mayores libertades que el presencial que se desarrolla en una compañía, es fundamental afrontarlo con la misma rutina. Aunque quizá no sea necesario vestirse con traje y corbata, es importante ducharse, vestirse y desayunar antes de ponerse a trabajar para afrontar la jornada con mayor predisposición profesional.

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