En muchos casos, esos cambios estaban previstos en los próximos años, pero la pandemia y el confinamiento han obligado a las compañías a aplicarlos de manera brusca y rápida para garantizar su actividad. Por ello, en la nueva normalidad conviene analizar las debilidades que se recogen y se ponen de manifiesto en el Informe de Perspectivas de la Red Global 2020 de NTT Ltd.

Considerando que en 2017, la misma cifra rondaba el 13%, pareciese que se ha dejado de dar prioridad a un factor que junto a una buena formación en seguridad para las plantillas podrían prevenir muchas de las amenazas digitales.

Aunque ese dato se refiere a la media, el estudio analiza con mayor detalle aquellos sectores que parecen estar más expuestos a la problemática. Así destacan negativamente y deberían replantear su inversión las industrias relacionadas con

• La tecnología
• El automóvil
• La fabricación

El año pasado, hasta un 69% de los activos de empresas tecnológicas estaban ya desfasados. En el caso de la industria, ese porcentaje se quedaba en el 44% de los equipos.

Si bien la falta de inversiones viene de atrás, el confinamiento y la pandemia han puesto de manifiesto la necesidad de recuperarlas. La mayor apuesta por el teletrabajo, así como la necesidad de implantar procesos digitales en la nube para continuar con la actividad ha incrementado notablemente la necesidad de recursos y eso está haciendo que las direcciones empresariales retomen los presupuestos dedicados a estas cuestiones.

Hay que considerar que además, la crisis sanitaria ha supuesto un desafío en sí misma para el sistema. De hecho, la presión sobre la red está en niveles máximos y las compañías de infraestructuras se encuentran en un momento complejo para gestionar una demanda muy al alza. Esto también podría suponer que las vulnerabilidades del sistema fuesen mayores, lo que incrementa el riesgo asociado si los negocios particulares no toman las medidas adecuadas.

El riesgo operativo de las compañías se ha incrementado por dos factores:

Estas dos cuestiones ponen de manifiesto que las empresas necesitan revisar pronto sus estrategias. Tanto en lo relativo a arquitectura de red y seguridad, como a los modelos de operación y soporte que reduzcan los riesgos operativos. El diseño de infraestructura ha de hacerse con premeditación, para evitar sobretensiones no planificadas o cortes críticos para la actividad.

Hay que tener en cuenta que la pandemia ha cambiado las cosas muy rápido, pero muchos de los hábitos de esta nueva normalidad serán indefinidos. Por eso la implementación de una política de gestión de la seguridad que promueva espacios de trabajo inteligentes que ofrezcan garantías es una clave para el aumento de la competitividad empresarial de hoy y de mañana.

Para la mayor parte del tejido empresarial español, la recomendación más eficiente, tanto a nivel de costes como de soluciones específicas pasa por la contratación de compañías especializadas que ofrecen estos servicios administrados de mantenimiento de la red y del estado del negocio.

En el listado de proveedores y partners asociados de Tic Negocios puedes encontrar una serie de compañías que ofrecen este tipo de soluciones en la Comunidad Valenciana.

Cabe recordar que la red es la plataforma vital para la transformación digital en las empresas. Por eso se debe invertir en ella y hacerla flexible, segura y robusta; aunque también fácilmente adaptable a los diversos cambios que pueden venir a nivel del negocio.

Implica también asegurarse la posición en el mercado, así como una ventaja competitiva sobre los demás si estos no han sido lo suficientemente rápidos o no han invertido el suficiente esfuerzo en lo que ya es una prioridad.

En Tic Negocios ofrecemos poner a tu negocio en contacto con empresas relevantes del sector tecnológico que son especialistas en servicios de digitalización. Consulta el listado en nuestra web o contáctanos si tienes alguna duda o pregunta sobre lo que más se adecúa a tus necesidades.