Gamificación y e-commerce: si el cliente se divierte, tu empresa vende más

Uno de los principales retos al que se enfrentan muchas tiendas online es el de evitar que los usuarios abandonen a la mitad el proceso de compra. El objetivo es retenerlos, y la gamificación se está convirtiendo en una de las mejores herramientas para lograrlo.

Si una tienda virtual pone en marcha técnicas de juegos en su propia web o aplicación, conseguirá no sólo atraer nuevos clientes, sino también reforzar el vínculo con los actuales y crear con ellos una relación de confianza a largo plazo.

La gamificación se define como el uso de experiencias de juego para mejorar el engagement. Dicho de una forma sencilla, se trata de inspirarse en las mecánicas de los juegos para luego aplicarlas en entornos que no lo son para cambiar el comportamiento del público objetivo.

Tipos de gamificación

Se pueden diferenciar cuatro tipos de gamificación:

Pura

La gamificación pura se emplea principalmente en redes sociales para que los usuarios hagan más uso de la plataforma y que realicen una determinada tarea jugando, como por ejemplo puntuar en una escala de valores su satisfacción con los últimos lanzamientos de la marca.

Simulación

Hay muchas interfaces que simulan el mundo real, como por ejemplo pilotar un avión de pasajeros. El simulador ofrece a los usuarios la posibilidad de disfrutar de una experiencia tal y como si estuvieran viviéndola en el mundo real.

Serious games

Son juegos que tienen propósitos de negocio. Es una buena estrategia para lograr un objetivo concreto a través de la interfaz de un juego.

Plataforma

Y, por último, se debe pensar en la plataforma para el proyecto de gamificación. Tratándose de un e-commerce, lo más probable es que sea en la tienda online, pero también existe la posibilidad de que sea vía SMS o correo electrónico.

dos personas que van a comprar algo en un e-commerce

Ventajas de usar la gamificación en el e-commerce

La gamificación ofrece ventajas muy interesantes a las tiendas online. Una de las mejores técnicas para fidelizar clientes es ofrecerles una experiencia de compra memorable.

Hay que conseguir que los clientes no sólo queden satisfechos con el producto y/o servicio adquirido, sino que también hayan disfrutado durante el proceso de compra. Si es así, es muy probable que repitan la compra en el futuro. Para ello, se pueden aplicar herramientas de gamificación, como por ejemplo los programas de puntos.

En la actualidad, existe una gran competencia entre empresas en todos los sectores de actividad en Internet. En los últimos años han surgido miles de tiendas online, de forma que la diferenciación es clave. Gracias a la gamificación, esos negocios pueden diferenciarse de sus competidores y, al mismo tiempo, aportar un valor añadido a los usuarios.

Los juegos también pueden ser muy útiles para atraer tráfico hacia el sitio web de la compañía. Por ejemplo, se puede poner en marcha un programa de premios para aquellos usuarios que más hablen de la marca o compartan sus productos en canales online como las redes sociales.

mujeres divirtiéndose con sus portátiles

Elaboración del plan estratégico

Para la elaboración del plan estratégico, la mejor metodología es la conocida como Gamification Model Canvas.

Los pasos a seguir son los siguientes:

Objetivos

Lo primero y más importante es definir cuáles son los objetivos del negocio y los resultados que se esperan conseguir.

Jugadores

A continuación, hay que conocer a los jugadores y entender cuáles son sus motivaciones y su comportamiento. Es necesario detectar el comportamiento antes del proceso de venta para impulsar la compra a través de un juego.

Dinámicas

Se entienden por dinámicas las sensaciones que el negocio quiere generar en su público objetivo.

Plan de acción

Una vez la tienda online conoce las sensaciones que quiere generar, el siguiente paso consiste en definir cómo lo va a hacer.

Objetivos

Lo primero y más importante es definir cuáles son los objetivos del negocio y los resultados que se esperan conseguir.

Ejemplos de gamificación

Uno de los mejores ejemplos de gamificación es el de Bonobos, una tienda online de Estados Unidos.

Creó un juego muy interesante bautizado como “Búsqueda del tesoro” con el objetivo de generar vistas y visitas en la página web. Para ello, la marca puso diferentes cupones de descuento que salían de manera aleatoria cuando los usuarios navegaban por la tienda.

La marca supo comunicar muy bien esta campaña, animando a la audiencia a que entraran cada poco tiempo en la tienda online para conseguir los cupones de descuento.

Por su parte, Guilt Insider llevó a cabo un proyecto de gamificación para fidelizar a sus clientes. Creó un programa de beneficios en el que los usuarios iban consiguiendo puntos y subiendo de nivel, desbloqueando funcionalidades como ventas privadas o exclusivas.